lunes, 26 de junio de 2017

Endogamia (II)



Segunda Parte:
-Borbones en España
-Guerra de Sucesión Española
-Almansa
-Valencia
-Utrecht
-El “caso de los catalanes”
    Clan de los españoles
-Economía de la Casa de Borbón


Borbones en España


                                                                                                                 Felipe V, proclamado Rey de España por su abuelo, es saludado al modo español por el embajador Castelldosrrius

1700, noviembre.- Tiene lugar la apertura del testamento del difunto Don Carlos y su lectura causa asombro. Se envía un correo a la corte francesa con el mandato de que, si Luis XIV no lo acepta, se dirija a Viena.

1700, 9 de noviembre.- El correo se entrevista con Luis XIV.

1700, 24 de noviembre.- Luis XIV se ha tomado su tiempo. Finalmente acata sus términos y convoca al embajador español, marqués de Castelldosrius. Ante él y la Corte francesa dice que su nieto Felipe de Anjou, allí presente, es ya Rey de España y le da la derecha, como manda el protocolo que se haga con cualquier soberano extranjero. El marqués lo saluda hincando la rodilla en tierra, a la manera española y le besa la mano. Todos juntos se dirigen a la Capilla Real para entonar un Te Deum. Se acaba de entronizar la Casa de Borbón en España.

Quien monta en cólera y muestra su desacuerdo es el emperador Leopoldo y así se inicia la Guerra de Sucesión Española.




Guerra de sucesión española (1701-1714)

Nombre que se da al conflicto armado que surge en Europa con motivo de la sucesión al Trono español, habiendo muerto el último rey sin heredero directo.

Causas:
-Las naciones europeas beligerantes no están de acuerdo con el testamento de Carlos II. España puede acumular exceso de poder.

También, y sobre todo, hay muchos intereses espurios: afán de perjudicar al contrario, al enemigo. Factores económicos, políticos, de dominio. Ocasión de apoderarse de tierras y privilegios que no se obtienen en la Paz y de manera honesta.

Por ejemplo: el príncipe Eugenio de Saboya, descendiente de Felipe II a través de la infanta Catalina Micaela y nombrado en el Testamento de Carlos II, sabe que nunca se sentará en el Trono de España, pero su intervención en la guerra, como General al servicio del Emperador, le reporta beneficios y el engrandecimiento de su Casa: con el tiempo, llegarán a ser reyes de Italia.

                                                                                                                               Los 3 reinos según Quevedo

-En España se convierte en una guerra civil porque lo que se entiende como “España oriental” (corona de Aragón) no lo acepta por temor a perder el foralismo.

Ideario de la Corona de Aragón, basado en el pactismo y el constitucionalismo, respecto a las relaciones entre soberano y súbditos y que antepone “a la fidelidad, la patria”, es decir, prevalece la defensa de las libertades, leyes y derechos de la patria a la fidelidad al rey, si este los viola.

De forma esquemática: la Guerra Civil de Sucesión es un enfrentamiento entre la España horizontal y la España vertical; una rotura entre ambas. No todo es tan sencillo: existió también una complejidad política y social en el conflicto, como compleja era la sociedad del XVIII. En general el Reino de Aragón se inclinó por el bando austracista a causa de los Fueros, pero en el caso de Cataluña se puede añadir un entramado económico y de preponderancia. ¿Hubo o no hubo verdadera voluntad de colaboración por las dos partes?

Contendientes:
-Bando borbónico: Francia y España.
-Bando austracista (Tratado de la Haya): Inglaterra, Holanda, Austria, Saboya, Portugal y Prusia.

En España: 3 partidos.
-Borbónicos (partidarios del heredero Felipe de Anjou, no de Francia).
-Austracistas. Partidarios del archiduque Carlos de Austria. (El emperador Leopoldo sostenía el derecho de su hijo “porque era el único verdadero Austria”. ¿Se refería al apellido?)
-Contemplativos. Se limitaban a verlas venir.
Dentro de cada uno había matices, opciones… Mucho idealismo, pragmatismo, odio, deseos de venganza, revanchismo… y, como siempre, el “quítate tú para ponerme yo”.

Nombres que en España recibieron los partidarios de los dos primeros bandos:
-Austracistas: carolistas, archiduquistas, imperiales, aguiluchos, vigatans, maulets.

Vigatans: naturales de la zona de Vich. El 17 de mayo de 1705, en nombre del Principado de Cataluña, firman (solo propietarios y nobles) el Pacte dels Vigatans, antecesor del Pacto de Génova, entre catalanes e ingleses, en el que aquellos se comprometen a apoyar al Archiduque; estos a respetar los Fueros y enviar tropas y dinero. Por supuesto Inglaterra “invita a toda España a adherirse a este pacto”.

Maulets: propio del Reino de Valencia. Origen incierto. Posiblemente del árabe Maula; esclavo, subordinado, persona de baja condición social; cosa inútil o despreciable.

Distintivo sonoro: el del cuerno rugoso del caracol marino más grande del mediterráneo (Choronia nodifera); en los años 40 del pasado siglo todavía se podían ver en muchas casas valencianas.- En la actualidad, una organización izquierdista lleva el nombre.de maulets.

-Borbónicos: felipistas, angevinos, botiflers.

Botiflers: también propio del Reino de Valencia. Origen igualmente incierto. Beauté fleur, bella flor, en referencia a la flor de lis.

Según Francisco de Castellví (cronista de la época), procede del apellido del mariscal Louis François de Boufflers, al servicio de Luis XIV.

En ambos bandos –austracista y borbónico– la adhesión fue premiada y el desafecto castigado. Las ofensas y las recompensas, junto con la dinámica de la guerra, explican la rapidez en muchos “cambios de chaqueta”.


                                                                                                                                     Felipe V

1700, noviembre.- Don Felipe llega a Madrid. Causa muy buena impresión: es joven y apuesto y viste una casaca de vivos colores… Ya en Madrid se le proclama rey con el nombre de Felipe V. Es el primer Borbón.

Su equipaje es cuantioso. Trae consigo su biblioteca personal, compuesta por 800 libros, que regala al Estado y serán el embrión de la Biblioteca Nacional.

Felipe de Anjou (1683-1746), nacido en Versalles, enterrado, por propio deseo, en la Granja de San Ildefonso; hijo de Luis, Gran Delfín y M.ª Ana Victoria de Baviera.- Es un muchacho rubio, con ojos azules; segundón del gran Delfín. Ha perdido a su madre en la infancia y su padre no le muestra el menor afecto, quizá por eso es inseguro, tímido, propenso a una melancolía que en su madurez se convierte en verdadera enfermedad.

Lo han educado para ser soldado con una formación muy rígida (excelente nadador y jinete, estudiante de matemáticas, astronomía…) y también intelectual: amor a las Bellas Artes. Ya entronizado aún continúa recibiendo clases, instruyéndose.

Tres personas influyen en gran manera en su vida:
-Madame de Maintenon (esposa secreta de Luis XIV a quien ha aconsejado que acepte la candidatura del nieto): la ve de manera esporádica, pero habla con él, le muestra afecto.
-Isabel Carlota del Palatinado, Duquesa de Orleans, su tía abuela. De pequeño le leía cuentos y ha conseguido inculcarle el amor a los libros y a la música; lo lleva al teatro, lo sienta a su lado en la mesa..., en fin, le enseña buenos modales.
-El abate Fenelon, quien (por consejo de Madame de Maintenon) se ocupa de su formación moral, quizás demasiado estricta: “Una conducta recta debe basarse en una religiosidad ferviente”, máxima que su educando procurará seguir toda su vida.

Don Felipe se enardece en el campo de batalla; tuvo voluntad y criterio propio; tenacidad y claridad de ideas: defendió lo suyo. En la vida civil es débil, se deja manejar. Su esposa Farnesio, el cardenal Portocarrero. El pueblo se da cuenta y se lo dice:

Anda, niño, anda.
Porque el Cardenal lo manda.

El Rey es consciente de ello y en la paz tiene el acierto de elegir buenos ministros. En el reinado de los Borbones empiezan a nombrarse para esos cargos a universitarios, llamados “manteístas”, por el manteo que llevan los estudiantes. Se prefiere la instrucción a la procedencia.


                                                                                                                            Felipe V vestido a la española con el Toisón de Oro

¿Se enamoró de España al entrar en contacto con ella? Pronto adopta la moda española.

1701.- Don Felipe va a Cataluña, reúne Cortes y jura sus Fueros. “Cataluña es la primera de todo el dominio español en quien su Magestad ha celebrado y concluido Cortes, concediéndole con ellas más que todos sus Serenísimos Anteriores juntos”, escribe Joan Bac, canónigo y catedrático de Filosofía de la Universidad de Barcelona.

                                                                                                   M.ª Luisa de Saboya

1701, 3 de noviembre.- Matrimonio religioso del Rey con su primera esposa, M.ª Luisa de Saboya, celebrado en Figueres en la Iglesia de San Pedro. Meses antes se habían casado por poderes.

1714.- Muere la Reina en febrero y en diciembre D. Felipe se casa con Isabel de Farnesio.

                                                                                                     Isabel de Farnesio

1701.- El emperador Leopoldo, sin previa declaración de guerra, invade los dominios españoles en Italia y el Rey sale de España para ponerse al frente de sus tropas. Por su actuación recibe el apelativo de El Animoso.

1702, mayo.- Tratado de la Haya: se unen Inglaterra, Holanda y Austria (la Triple Alianza) y le declaran la guerra a Francia y España.

En Europa (primer campo de batalla de la guerra de Sucesión española), hay 2 Reparticiones: se desmiembran las posesiones españolas. Francia también sufre pérdida de plazas. El héroe del momento es John Churchill, ennoblecido (y enriquecido) por la Reina Ana con el título de Duque de Marlborough (el famoso Mambrú español). Brillante y combativo. Apartado de escena cuando sus servicios ya no interesan.

1703, 12 de febrero.- El Archiduque es aclamado como Rey de España en la Corte de Viena; Leopoldo y su hijo José renuncian a su derecho al Trono español. Se menciona el respeto a los Fueros, tal como pide el difunto Carlos II en su testamento.


                                                                                                                                       Archiduque Carlos

Carlos Francisco de Habsburgo y Pfalz-Neoburgo (1685-1740) nace y muere en Viena, en cuya Cripta imperial está enterrado. Hijo segundo del emperador Leopoldo y de su tercera esposa, Leonora Magdalena.



Rey de España (1705-1714), Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico (1711-1740), Rey de Hungría y Bohemia.

Aunque a su nacimiento nada hace pensar que pueda ocupar un trono, como Archiduque de Austria recibe una educación esmerada, con un elevado concepto de la dignidad regia; amante de guardar la etiqueta y el ceremonial. Carácter autoritario y al tiempo indeciso. Fue su preceptor Don Antonio Florián de Liechtenstein. Maestro y discípulo estuvieron ligados de por vida.

Don Carlos agradeció los servicios de Don Antonio creando el Principado de Liechtenstein. Curiosamente es el único estado, de aquel conglomerado que formaba el Sacro Imperio Romano Germánico, que existe en la actualidad. (Ya lo escribió Quevedo:”Poderoso caballero es Don Dinero”.)

Carlos VI tuvo ambiciones musicales: toca el clave, escribe composiciones, dirige la orquesta de la Corte.

¿Piensa verdaderamente el Archiduque que él es el heredero legítimo del Trono español? Los austracistas, ¿lo tienen como jefe porque es así o porque les va bien a sus intereses? Quizás convendría estudiar con más profundidad que, como heredero de los Habsburgo, él cree en la política mediterránea que iniciaron los Reyes Católicos y en la universalidad de Carlos V, junto con la forma de gobernar de los Austrias españoles.

El historiador Marcello Verga define como “Il sogno spagnolo”, aquel en que está sumido y del que nunca despertará.

En su gobierno como emperador crea la Cancillería de Estado al modo hispánico, e introduce el protocolo español. Funda la Escuela Española de Equitación (Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, Unesco 2015).

1713.- Pragmática Sanción. Como Emperador –quizás aconsejado por la experiencia– la firma. En ella se deroga la Ley Sálica (que es la que le ha permitido a él ocupar el trono imperial) y se prohíbe la división de sus estados. A su muerte no es acatada y da lugar a la Guerra de Sucesión Austríaca (1740-1748).

Se dice que la última palabra que pronunció, antes de morir, fue “¡Barcelona!”.

Caso curioso.- Orden del TOISON DE ORO (segunda en importancia en el mundo, después de la de la Jarretera), fundada en 1429 por el Duque de Borgoña. Gran Maestre: Rey de España. Guerra de Sucesión; lo son ambos Soberanos. El Tratado de Viena: le permite al emperador Carlos VI utilizar el cargo de forma vitalicia. A su muerte no se respeta el acuerdo y los emperadores austríacos lo siguen usando. Actualmente existen dos ramas: española y austríaca. El tesoro de la Orden radica en Viena.

1703.- Felipe V nombra virrey de Cataluña a Francisco Antonio Fernández de Velasco y Tovar, que tuvo una actuación indebida: la represión fue durísima. Hizo que los “tibios” se decantasen y parte de los conjurados se unieron a Darmstadt en su marcha hacia Lisboa.

Jorge, príncipe de Hesse-Darmstadt (1669-1705), alemán; virrey de Cataluña (1698-1701) intuye, en los últimos tiempos de su mandato, que no volverá a ser reelegido. Tiene contactos con extremistas catalanes y es expulsado de España. Va a Viena para ponerse al servicio del emperador. Leopoldo le nombra embajador especial y le manda a visitar las cancillerías europeas, con el encargo de convencer a sus políticos para que declaren la guerra a los Borbones. Vuelve a Cataluña y se convierte en jefe del ejército austracista.

1704, marzo.- El Archiduque desembarca en Lisboa para obtener la ayuda de Portugal y reunirse con los nobles españoles partidarios suyos. Promete “librar a todos de la tiranía del Anjou”. Entra en Extremadura. Es frenado en su avance.

1704, abril.- La guerra se radicaliza. Se llega a ofrecer a Felipe V los dominios que poseía España en Italia (de los que le ha despojado el Emperador y que, una vez recuperados, será donde reine el futuro Carlos III de Borbón), a cambio de entregar al Archiduque España y Colonias; es decir, un nuevo estado de Repartición. Don Felipe contesta: “yo defiendo la Corona de España”.

1704, 4 de agosto.- Gibraltar cae en poder de los aliados y las tropas felipistas no lo pueden recuperar. Se consideraba una plaza de poca importancia, con guarnición escasa, pero había permanecido fiel a D. Felipe. Darmstandt, ¿con sus acompañantes o solo?, se había unido a las tropas anglo-holandesas que asedian la plaza. Los ingleses se apoderan de civiles y con ellos obligan al jefe militar a rendirse.

El príncipe será Gobernador de Gibraltar de 1704 a 1705. Posteriormente vuelve a Cataluña; muere en el asalto a Montjuich. El primer héroe muerto del bando austracista.


La guarnición de Gibraltar estaba compuesta por 500 hombres al mando de D. Diego de Salinas. El Comandante en Jefe se rinde a un nuevo monarca español, Carlos III de Austria, pero el pabellón que se izó fue inglés, inexplicablemente, porque la flota era anglo-holandesa pero al servicio del Rey de España, al cual llevaba en uno de sus navíos hacia Barcelona.

Y como dice el dicho: “tal día hizo un año”.

1705.- Asalto definitivo a Barcelona por parte de la flota anglo-holandesa. No pudiendo entrar en España por Extremadura, como hubiese sido su deseo, el Archiduque ha abordado una de las unidades y se dirige con los confederados a Cataluña.

1705-1706.- Barcelona. Reconocido como Rey de España con el nombre de Carlos III, inicia formalmente su reinado. Celebración de Cortes. Planes. Promesas. Unos seis mil catalanes borbónicos salen de la ciudad.

1706.- Don Felipe fracasa cuando trata de recuperar Barcelona. La correlación de fuerzas varía. Inglaterra financia la campaña catalana. Los partidarios de Don Carlos, que habían jurado anteriormente fidelidad a Don Felipe, piensan que la situación irá mejor con el Archiduque, pero sin concretar. Se recuerda que más que odio al francés por parte de los catalanes es al castellano, como ocurrió en 1640 con la Guerra de Secesión.

1706, mayo.- Las tropas aliadas marchan desde Cataluña hacia la capital. Galway conquista Madrid, a donde se traslada el Archiduque, que es proclamado Rey con el nombre de Carlos III y firma ya como tal. Se le recibe con hostilidad “Castilla será pertinaz en el amor a Felipe”, había dicho el almirante de Castilla. Para caldear los ánimos el nuevo monarca manda tirar monedas al paso de su carroza. El pueblo lo agradece.

Viva Carlos Tercero.
Mientras dure el echarnos dinero.

En esa operación Carlos III había recibido la ayuda de su tía Neoburgo, confinada en Toledo por orden de Felipe V. El rey Borbón, junto con la familia real, se había refugiado en Burgos. Sus tropas van descendiendo para reconquistar la capital. Paso obligado: Toledo para salvar a doña Mariana de las iras de los toledanos que han vuelto a las filas felipistas. La conducen a Bayona. Carlos III se retira a Valencia.

Se mantienen fieles a la causa borbónica, aparte de Castilla, Navarra, País Vasco, Galicia, Extremadura y especialmente toda Andalucía.

En las Islas Baleares hubo sus más y sus menos. Mallorca resistirá hasta el final. Menorca pasa a manos británicas.

1706, junio.- Zaragoza proclama rey a Carlos III.

Para el Reino de Aragón no hay inconveniente con el ordinal de D. Carlos; D. Felipe hubiese sido IV, ya que Felipe I de Austria solo fue Rey de Castilla.

1706, verano.- La “noche triste” de Felipe V.

Hasta su abuelo le abandona. Los borbónicos españoles siempre presumirán de ser ellos los que le han hecho ganar la guerra. Siempre fieles, siempre a su lado… Los famosos “guapos” que forman parte de las guerrillas.

1707.- Cambia espectacularmente la situación, sobre todo después de Almansa: tropas felipistas tienen expedito el camino al reino de Valencia; los austracistas no logran bloquear la ruta hacia Navarra, a través de la cual Francia abastece a los borbónicos.

1707.- Felipe V vuelve a Madrid después de Almansa.

                                                                                                Isabel Cristina de Brünswick

1708, 30 abril.- Barcelona. Llega Isabel Cristina de Brünswick, con quien el Archiduque se había casado el año anterior por poderes. Matrimonio religioso en la Basílica de Santa María del Mar. La acompañan 5.000 caballos y 10.000 hombres de infantería, lo que supone gran ayuda.

Se establece una verdadera Corte en Barcelona. Los nuevos reyes introducen el “estilo imperial”: Casa del Rey, Casa de la Reina… El todo dirigido por Don Antonio, antiguo preceptor de D. Carlos.

Ocupan un palacio nuevo, antigua lonja de paños, mandada rehabilitar por Felipe IV como residencia virreinal, acomodándola a las exigencias regias; se debe honrar la grandeza de la dinastía: teatro, conciertos, funciones religiosas. Una vida que disgusta a los catalanes por el dispendio económico que supone. Don Carlos argumenta que hay que dar sensación de normalidad en plena guerra y que la “propaganda mediática”·es fundamental para ganarla.

Prodiga concesiones y títulos nobiliarios para ganarse adhesiones, lo que se puede calificar de política demagógica y oportunista, pero ¿qué monarca europeo no lo hace a su conveniencia? En el declive de la situación financiera austracista, solo se conceden honores sin repercusión económica. “Se tendrá presente” es el término que se usa cuando no se pueden atender peticiones.

Los títulos nobiliarios solo tendrán validez al negociarse el Tratado de Viena (1725), porque así se acuerda entre las partes.

Su programa (por lo menos teórico) económico y político se ajusta a lo que demanda la sociedad catalana. Celebra Consejos como los de la época de Carlos II, en los que a veces toman parte sus consejeros vieneses. Existe una injerencia alemana en los asuntos españoles, pero Don Carlos tiene un carácter autoritario: nada se resuelve sin que él le dé el V.º B.º, por lo que se ralentizan todos los trabajos. A su marcha definitiva quedan multitud de consultas sin evacuar.

Es poco conocida la actuación del Archiduque como rey por la escasez de información escrita. Él mismo manda quemar su retrato y pendón real al dejar Madrid por última vez, así como papel sellado. Don Felipe también ordena destruir toda la documentación austracista posible.

¿Se puede hablar de la actuación política de Don Carlos? ¿Fue solo un posibilismo? ¿Lo que pudo haber sido es lo que realmente hubiese sido?

1709.- El Papa Clemente XI reconoce a Don Carlos. Las tropas imperiales han cercado Roma y lo presionan. Rotura de relaciones de Felipe V con la Santa Sede. Se expulsa al Nuncio y se cierra la Nunciatura.

1710, 20 de agosto.- Batalla Monte Torrero en Zaragoza; revés para las tropas borbónicas. Don Felipe se salva con la ayuda de un molinero, que le proporciona un uniforme de soldado raso. Disfrazado, huye.

1710, 21 de agosto.- El Archiduque entra en Zaragoza. Tiene un consejo de guerra con los aliados, quienes deciden su entrada en Madrid. Va a la capital donde nuevamente es acogido con frialdad. Hace acuñar moneda. Felipe V se retira a Valladolid.

                                                                                                           Felipe V en la Batalla de Villaviciosa. Jean Alaux

1710, diciembre.- Batallas de Brihuega y Villaviciosa, decisivas para la causa felipista. El rey Borbón vuelve a Madrid.

1711.- Felipe V entra definitivamente en Zaragoza.

1711.- Muere el emperador José sin dejar hijos varones y le sucede su hermano Carlos. El nuevo emperador parte hacía Viena, dejando a Isabel Cristina como lugarteniente y Capitán General de Barcelona y gobernadora de los demás reinos de España “para demostrar mi paternal amor hacia mis fieles vasallos”.

1712, octubre.- Empieza la evacuación de las tropas inglesas en Cataluña. Abandonan la ciudad. Se niegan a dejar embarcar a los civiles que se lo pedían desesperadamente.

1713, 15 de marzo.- Embarca la Emperatriz con rumbo a Viena.

1713, 19 de julio.- Parten las tropas imperiales. Los nobles y el alto clero se pasan al bando borbónico, así como algunas ciudades. Se proclama la resistencia ante una situación desesperada

Carlos e Isabel, necesitados, al fin nos han dejado.
Ingleses han fallado.
Portugueses han firmado.
Holandeses firmarán.
Y al fin nos colgarán.

A la marcha del Emperador y de todo mando superior, Cataluña se convierte “de facto” en una República. Dicen que luchan “por la libertad de España” y que su modelo no es el secesionista, sino el antiguo federal.

                                                                                                                       Rafael Casanova, Conseller en cap, toma el mando de la ciudad

Barcelona: durísimos enfrentamientos entre ambos bandos; represalias, incendios, ejecuciones. Fanatismo religioso: procesiones, sermones, penitentes, dirigidos por el bajo clero que ha permanecido en la ciudad. Faltan ya alimentos básicos. No reciben ayudas.

El general Basset acude en su ayuda y ocupa un puesto de mando. Un regimiento de valencianos, con el nombre de Nuestra Señora de los Desamparados, también entra en su defensa.

Para evitar desórdenes patrulla la ciudad la “Compañía de la Quietud”.

1714, julio.- Berwick, ya mariscal y con nacionalidad española, entra al frente de tropas francesas de refresco enviadas por Luis XIV. Felipe V da órdenes sobre el trato que se ha de dispensar: “este pueblo rebelde que además de resistirse a entrar bajo mi obediencia, presenta las más vivas solicitaciones en todas las Cortes extranjeras para acarrearme nuevos problemas y, si pudieran, incitar a la guerra a toda Europa”.

Ultimátum de Berwick: “rendición en 6 horas o pasaré a todos a cuchillo”.

1714, 12 de septiembre.- Barcelona capitula. Entran en la ciudad las tropas borbónicas.


1714, 18 de septiembre.- Capitula también el Castillo de Cardona. Resistencia honrosa pero obcecada y suicida. Ha pasado el tiempo de la negociación, solo queda el de la obediencia.

Todo es ya Historia…





Almansa


1707, 25 de abril.- Lunes de Pascua. Tiempo nublado y frío. A las 3 de la tarde se abre fuego cerca de las tapias de las huertas que rodean Almansa, población que en aquel momento contaba con 3.400 habitantes. Se enfrentan dos ejércitos: el borbónico que defiende al rey Felipe V y el austracista, defensor del Archiduque, Carlos III desde 1703.

Va a comenzar la famosa Batalla de Almansa, cuya noticia dio la vuelta en toda Europa. No es un episodio cualquiera en la Guerra de Sucesión Española. Hasta entonces los resultados eran favorables a D. Carlos. El triunfo en esta ocasión de las tropas borbónicas, supuso un vuelco espectacular en la situación a favor de D. Felipe.

Almansa es la entrada natural de Castilla a Valencia. La victoria felipista supone tener la entrada expedita en este reino.

Ejército confederado

Mando: Henri Massue de Ruvigny, Duque de Galway (1648-1720) y Antonio Luis de Sousa, Marqués Das Minas (1644-1718).

                                                                                                             Henri Massue de Ruvigny, Duque de Galway

Efectivos: Unidades de los ejércitos inglés, holandés y portugués. Se adhieren franceses hugonotes pagados por Inglaterra y Holanda.

Campamento: Al caer de la tarde del día 24 los austracistas establecen su campamento en Torre de Bogarra (Caudete).

Ejército borbónico

Mando: James Fitz James Stuart, Duque de Berwick (1670-1734).

                                                                                                James Fitz James Stuart, Duque de Berwick recibiendo el Toisón de Oro

Efectivos: Unidades francesas enviadas por Luis XIV, parte del ejército español de D. Felipe con soldados de origen italiano y suizo; guardias valones, batallón de irlandeses (formaban la guardia personal de Berwick). Este contingente aumenta cada día con la incorporación de componentes de formaciones dispersas de La Mancha, Andalucía y Castilla.

Campamento: Cientos de tiendas de lona en la zona del “Hondo” para la tropa. La oficialidad se alojó en casas nobles. Berwick lo hizo en la de D. Luis Enríquez de Navarra, Alcaide del Castillo de Almansa.

Es la primera vez en la Historia que a los franceses los dirige un general inglés y a los ingleses un general francés.

James Fitz James Stuart (Fitz James Stuart = hijo de Jacobo Estuardo), duque de Berwick. Es hijo ilegítimo del rey Jacobo II Estuardo y de Arabela Churchill (hermana del Duque de Marlborough). Militar de carrera, nacionalizado francés, ha dado días de gloria a su nueva patria. A su sentido de la estrategia se debe la victoria en esta batalla. Felipe V le concede grandes propiedades y los ducados de Liria y Jérica. Familiarmente ligado a la casa de Alba. El Rey le concede el Collar del Toisón de Oro.

Es difícil que un inglés deje de ser inglés: al acabar la batalla invita a la oficialidad inglesa derrotada a que entre en su tienda para reponerse y asearse, y a toda la tropa inglesa, hecha prisionera, la libera.

Henri Massue, soldado y diplomático, duque de Galway, hugonote. Francés de nacimiento al servicio de las armas inglesas. Se “disculpa” por la derrota, alegando que una herida grave en la cabeza, de la que manaba abundante sangre, le impedía la visión: tuvo que delegar el mando en generales ineptos.

El ejército borbónico, empujado por el austracista, avanza desde Chinchilla. Sigue la línea Caudete – Yecla – Montealegre – Pétrola, cuyas guarniciones se incorporan a las fuerzas de Berwick. Busca una zona que no haya sido víctima de saqueo por parte de los austracistas, a fin de no tener dificultades para abastecer a su numerosa tropa.

Se murmura del general por recientes derrotas y su origen inglés levanta suspicacias. Es su honor el que está en juego.

Prolegómenos

A las 3 de la madrugada del día 25 suenan los toques de abada (diana) en el campamento de Galway. Los soldados se ponen en marcha, formando cuatro grandes columnas paralelas. En “Torre Grande” dejan su bagaje y se hace recuento: unos 16.000 hombres aproximadamente.

Sobre las 11, la avanzadilla inglesa, desde los altos de “Las Cabezuelas”, observa movimiento en el ejército de Berwick. Piensan que van a huir. Los austracistas corren en tromba para impedirlo y las columnas empiezan a desplegarse en la antigua “Laguna de Salazar”.

Los observadores confederados han dado cuenta de que el enemigo es superior en número, pero la bicefalia en el mando y el convencimiento de la incapacidad y miedo de Berwick, les incitan a aventurarse en terreno desconocido.

Formación y combate

Ambos ejércitos forman dos líneas paralelas con ala izquierda, ala derecha y centro, ocupadas por infantería, caballería y artificieros con baterías de cañones.

                                                                                                                                             Formación ejércitos

La primera línea borbónica ocupa 6 kilómetros de extensión. A 200 metros está la segunda, que como respaldo tiene las tapias de las huertas. Los austracistas están formados de manera similar. La distancia que los separa es de 1.500 metros. Se observan.

-3 de la tarde.- Un cañón borbónico resuena, al que responden las baterías del ejército de D. Carlos. La batalla ha comenzado.

Las dos formaciones se van aproximando de forma lenta y cadenciosa. Se producen escaramuzas y avances rechazados. Algunas unidades aliadas logran atravesar las líneas felipistas y llegar hasta Almansa.

-4 de la tarde.- La situación se ha vuelto peligrosa para Berwick. Tiene controlados los extremos, pero la línea del centro amenaza con romperse.

La superioridad numérica le permite utilizar soldados de ambas alas para neutralizar a los escasos ingleses que habían penetrado en la ciudad y recomponer la brecha abierta por los austracistas y de la que estos tienen que retirarse por temor a que se convierta en una bolsa.

Estabilizado el centro, Berwick se ocupa del ala derecha. Ordena una carga de bayoneta y la superioridad de la caballería española hace el resto: los confederados se baten en retirada.

-A las 4 y media la situación ha dado un vuelco en favor de Berwick.

En el ala izquierda la situación al principio indecisa, cambia porque la caballería portuguesa huye del campo de batalla y a los soldados de infantería abandonados, o se les hace prisioneros o se les persigue implacablemente.

Día 26.- Se organiza a los prisioneros. La toponimia de la región nos habla de lo ocurrido. “Cuestas y Barracas de las Baterías”. “Cerros de los Prisioneros”.

Pérdidas entre muertos y heridos:
-Ejército borbónico, unos 2.500.
-Confederados, tres cuartas partes del ejército presente.

                                                                                                            Castillo de Almansa

Día 27.- Por la noche se celebra una cena para los oficiales de ambos bandos y al final se firma la rendición.

Berwick tiene el camino libre hacia Valencia.






Valencia

A la llegada de Felipe V a España, le permanece fiel: pone a su disposición 600 hombres que el monarca envía a Cádiz, con lo que Valencia queda desguarnecida.

                                                                                                                                  Esperança Ramos i Lis, madre de Basset

La flota anglo-holandesa, a su paso hacia Cataluña, desembarca en pueblos del litoral a agentes austracistas, para hacer adeptos a la causa.

                                                                                                                                       Joan Baptista Basset

En el general Basset, militar de carrera que estuvo al servicio de Carlos II y del emperador austríaco, encuentran su mejor valedor. Ayuda a la propaganda y a la agitación; dirige a los sublevados y hace suyo el problema de los campesinos.

Principal reivindicación de estos: –Se habían manifestado ya en 1693, Segunda Germanía- que algunas villas dejaran de ser de señorío y se convirtieran en de realengo. Su problema era más anti-señorial que dinástico. Se les promete que el Archiduque lo solucionará. ¿Cómo cambiar una forma de pago sin que cambie primero la sociedad que lo ha establecido?

Partidarios

A favor de Don Felipe: campesinos de realengo, alto clero, nobleza.
A favor de Don Carlos: campesinos, bajo clero, gremios urbanos, pequeña nobleza.

La adhesión valenciana a Don Carlos tenía causas complejas: la defensa de los Fueros, sentimientos anti-franceses, quejas por el exceso de protección al comercio galo en detrimento del autóctono y por la prohibición de exportaciones…

Los emisarios del Archiduque llevaban una carta de este en que exhortaba a los valencianos: “a luchar por rescatar la patria de la servidumbre a que se ve sometida”, sin especificar promesas concretas de ningún tipo.

1706, agosto.- Los campesinos se levantan en armas, a las órdenes de Basset, toman Denia y proclaman rey al Archiduque con el nombre de Carlos III.

                                                                                                                                                     Levantamiento campesinos

Don Felipe no puede enviar refuerzos importantes –todos sus efectivos están empleados en el intento, fallido, de reconquistar Barcelona-, solo manda un grupo de catalanes, al mando de Nebot, que se unen a los insurrectos al entrar en contacto con ellos. Todos juntos marchan hacia la capital, la cual se entrega sin lucha, “en medio de una alegría indescriptible”.

Un levantamiento en Vinaroz y la conquista de Alicante, convierten a todo el Reino de Valencia (excepto Peñíscola y la Hoya de Castalia) en dominio austracista.

Basset cambia el pago de derechos señoriales por exacciones fiscales. Ruina de la Hacienda. El general es relevado y empieza un largo peregrinaje por las cárceles valencianas. Sus partidarios gritan: “Viva Basset antes que Carlos III”, inútilmente. El virrey Conde de Cardona inicia una política “moderada”, bien vista en las “alturas”.

1706, 30 de septiembre.- El Archiduque entra en Valencia, donde reside durante 5 meses. Todo el reino de Aragón está de parte suya y ha ocupado por vez primera Madrid.

1706, 10 de octubre.- El Archiduque jura solemnemente los Fueros en la Catedral de Valencia y es proclamado rey de manera oficial con el nombre de Carlos III.

En el lado izquierdo de la puerta de la Capilla de la Comunión de la Basílica de Nuestra Señora de los Desamparados, hay colgado un cuadro que representa a la Inmaculada Niña, ante el que rezó el Archiduque.

1706, 29 de noviembre.- Reunido en Junta Don Carlos se ocupa de la petición de los campesinos y acuerda revocar la decisión de Basset “hecha sin orden ni licencia de Su Magestad” y que contravenía los Fueros que el propio Rey acababa de jurar.

1707, 7 de marzo.- Abandonan la ciudad, a pesar de las súplicas del Gobierno, el Rey, su Corte y nobles de su partido. ¿Motivo? El avance de las tropas borbónicas y el estar Valencia y su provincia desprotegidas de fortificaciones.

También influyó el malestar social que se había producido en Valencia por la revocación de las medidas anti-señoriales promovidas por Basset y la encarcelación de este. Seguramente se produce una desmotivación por la causa austracista que explicaría el rápido éxito de los borbónicos después de Almansa.

1707, 25 de abril.- Almansa.

Las derrotadas tropas austracistas huyen hacia Barcelona. Se niegan a ayudar a los valencianos.

1707, 6 de mayo.- Valencia ciudad. Berwick detiene sus tropas al pie de las murallas y manda emisarios pidiendo rendición. El Consejo General la aprueba por estar “sens defensa, sens cap, sens virrei” (sin defensa, sin jefes, sin virrey) y querer salvar la vida de aquellos que el Archiduque había dejado abandonados. Se firman las Capitulaciones.

1707, 8 de mayo.- Berwick manda un contingente de la tropa; el resto queda fuera para evitar saqueos y enfrentamientos. El pueblo está indignado por la situación.

1707, 8 de mayo.- Entra el general en Valencia y preside un Te Deum en la Catedral. Durante el acto se producen desórdenes y se dan vivas a “Carlos III”. Berwick advierte:

“Este Reyno ha sido rebelde a su Magestad (Felipe V) y ha sido conquistado, habiendo cometido contra su Magestad una grande alevosía, y así no tiene más privilegios ni fueros que aquellos que su Magestad quisiere conceder en adelante”.

1707, 12 de junio.- Después de un mes de resistencia, Játiva es saqueada, incendiada, arrasada, “por su grande obstinación y rebeldía” y para que sirva de ejemplo a los que todavía resisten y cuyo número aumentaba. Dice D´Asfeld, jefe de la tropa:

“Entrándose espado en mano en la ciudad, y pasando a cuchillo a cuantos han hallado, que la defendían hasta en un convento y dos iglesias, experimentando todos el último precipicio de su bárbara resolución”.

                                                                                                                   Felipe V cabeza abajo

La “memoria colectiva” propició que en los primeros 50 del pasado siglo un grupo de jóvenes setabenses pusiese el cuadro de Felipe V cabeza abajo. Y así permanece.

La cosa viene de largo. Las dos “L” que lleva el escudo de Valencia (“Dos veces leal”) le fueron concedidas por Pedro el Ceremonioso por su ayuda en las “guerras de los dos Pedros”, que mantuvo Aragón contra Castilla (siglo XIV).

1707, 29 de junio.- Por el Decreto de Conquista, derogación Fueros de Valencia y Aragón.

1708, enero.- Caen Alcoy y Denia. Basset, indultado por el Archiduque, trata de detener a los borbónicos sin conseguirlo.

1709, 19 de abril.- Se rinde el contingente inglés que defendía el Castillo de Santa Bárbara en Alicante. Ya no hay tropas regulares. Hasta la caída de Barcelona, partidas de “migueletes” continúan hostigando a los felipistas.

                                                                                                                                      Santa Bárbara, en Alicante, pasa a manos borbónicas

Se acaba la guerra en el Reino de Valencia. Berwick es capitán general y la ciudad está bajo jurisdicción militar. Se desmantela el entramado constitucional y social. Los cargos importantes están copados por castellanos.

Desde la entrada de las tropas borbónicas, han sido constantes las peticiones de clemencia dirigidas al Rey. La represión es muy dura; hasta se apela a la Inquisición. El Arzobispo Folch de Cardona se exilia, por propia voluntad, a Viena.

Los civiles valencianos están obligados a entregar sus armas y un bando prohíbe que los niños jueguen a “maulets y botiflers”.

Recuerdo de Almansa:
Quan el mal ve d´Almansa a tots alcança (Cuando el mal viene de Almansa, a todos alcanza).

De ponent, ni vent ni gent (De poniente, ni viento ni gente).





Utrecht

Tratado de Utrecht, Paz de Utrecht o Tratado de Utrecht-Rastatt, nombres con los que se conoce a una serie de tratados firmados entre los estados europeos enfrentados en la llamada Guerra de Sucesión Española y que conducen a su fin (1713-1715).


1709.- Preliminares de la Haya.- Francia: ejércitos derrotados y grave crisis económica. Confederados tratan de aprovechar la ocasión. Luis XIV no puede aceptar condiciones: hacer más concesiones y lograr que su nieto abandone trono español.

1710, 10 de enero.- Geertruidenberg.- Propuesta francesa: compensar Felipe V renuncia trono español con soberanía Nápoles, Sicilia, Cerdeña. Ingleses lo rechazan y proponen a Luis XIV no luchar contra su nieto, pero aportar 500 mil libras mensuales para que lo hagan ellos. Hay más exigencias por parte de aliados. Marlborough y el príncipe Eugenio se arrepentirán de su actitud intransigente.

1710, agosto.- Cambia la situación con la victoria española en Brihuega y Villaviciosa.

La situación también ha cambiado para la reina Ana.
-1707.- Inglaterra y Escocia forman oficialmente coalición Gran Bretaña: abierto el camino para que la suceda un protestante y no un católico.
-1710.- Sube al poder partido tory, amante paz. Marlborough es despedido.

                                                                                                                                      Ana de Inglaterra

Luis XIV y Gran Bretaña inician conversaciones secretas.

1710, diciembre.- Los ingleses hacen saber a Luis XIV que ya no apoyarán al archiduque Carlos en su pretensión al trono de España, a cambio: concesiones comerciales y coloniales.

1711, 17 de abril.- Muere el emperador José y le sucede su hermano Carlos, que no renuncia a ser rey español. Antes de salir de Barcelona se acuña medalla conmemorativa:

                                                                                                                                                         Medalla conmemorativa

Carolus Hispaniarum, Hungariae et Bohemiae Rex, Archidux Astriae, electis in Regem Romanorum

1711, 22 de abril.- Francia acepta las dos principales demandas de la reina Ana:
- cambiar la ayuda a Jacobo III (católico) por la de la Casa Hannover (protestante),
- excluir a Felipe V (confirmado como rey español) de la línea sucesoria de Francia.

1712, 29 de enero.- Utrecht. Mensajes de protesta holandeses e imperiales, desoídos por la soberana. Se reúnen las partes beligerantes.

                                                                                                                 Duque de Marlborugh

Es evidente “la grande unión y armonía que hay en Utrecht entre los ministros de Inglaterra y Francia”.

A Ios ingleses no les importa si el Rey de España es Don Felipe o el príncipe de Saboya; lo que no quieren es acumulación de poder en otras manos que no sean las suyas.

Luis XIV prefiere a su nieto, delfín. La reina española le apoya. Don Felipe ya se pronunció en abril de 1711: “Prefiero seguir siendo rey de España, agradecido por la fidelidad que me han mostrado mis súbditos de la Corona de Castilla”.

1712, 12 de junio.- Sesión en el Parlamento británico. Asegurada sucesión línea protestante en la persona de Jorge de Hannover. La reina Ana discursea: “La ansiedad de que España e Indias hubiesen podido estar unidas a Francia ha sido la principal causa del inicio de esta guerra (…) Francia y España estarán ahora más divididas que nunca y de esta manera, gracias a Dios, se restablecerá el equilibrio de las potencias de Europa”. La Historia no dice cuantos Te Deum se rezaron después de estas palabras.

1712, 21 de agosto.- El ejército británico se retira de facto de la contienda. La noticia es mal recibida en Viena. “Vender a mal precio tanta sangre derramada” dice Carlos VI, a cuyas manos pasan la mayoría de estados españoles extra-peninsulares.

1712, 5 de noviembre.- Ante las Cortes de Castilla se formaliza la renuncia Don Felipe al trono francés.

1713, 11 de abril.- Firma primer tratado entre los reinos de Francia, Gran Bretaña, Prusia, Portugal, Ducado de Saboya y Holanda. Cesiones y compensaciones entre ellos. A España ya no le queda nada en Europa.

¿Y el Papa? Clemente XI se caracteriza por su política errática. No pide bienes ni posesiones, sino que el papado conserve cierto ascendiente espiritual en tierras donde siempre lo ha tenido. Peligro situación por los nuevos repartos. No es convocado a Utrecht. Manda a su representante, a quien nadie presta atención. ¿Está en tierras de herejes? ¿Ha empezado ya la secularización de Europa?

1713, 13 de julio.- Utrech. Plenipotenciarios españoles (retenidos un año en París por británicos a fin de evitar su presencia en reunión anterior) firman acuerdo con representantes ingleses.

España concede:
-Gibraltar y Menorca.
-“asiento de negros” (144 mil esclavos negros enviados América española en 30 años).
-“navío de permiso” (barco 500 toneladas hará trasporte mercancías libres aranceles).

Un inciso:
En la práctica, Inglaterra no se conforma. Empieza el contrabando y la piratería.
Guerra Asiento o de la Oreja de Jenkins (1739-1748).
-Lugar: el Caribe.
-Plaza fuerte: Cartagena de Indias.

El “caballero” Jenkins se presenta en el Parlamento británico con su oreja en un frasco de formol. “Me la ha cortado el capitán de un navío advirtiéndome: ve y dile a tu rey que lo mismo le haré si se atreve”.

¡Hurra! Gana España. La Marina Española ya está a la altura de la británica.

Gran Bretaña cede a instancias de Don Felipe lo que le pide en el “caso de los catalanes”.

Inglaterra, árbitro de “the balance of power” (equilibrio de poder) en Europa; es el gran beneficiario de la guerra.

Estados asistentes Utrecht.- firman 19 tratados y convenciones bilaterales y multinacionales.

Carlos VI (ha recibido Milán, Sicilia, Cerdeña y Países Bajos españoles) se niega a firmar: eterno aspirante a la corona de España (recibió el sobrenombre de “el pretendiente”).

1714, 6 de marzo.- Tratado de Rastatt entre Francia y el Imperio.

1714, 7 de septiembre.- Tratado de Baden: completa el anterior.

1725, 30 de abril.- Tratado de Viena; Carlos VI reconoce a Felipe V como Rey de España.



d


Hay una Causa Común: el trono español, pero con disparidad de intereses, de actuaciones, de pérdidas y ganancias.

Los grandes triunfadores fueron los ingleses. Inglaterra, por su posición insular que la libera de los ataques de los ejércitos continentales, está defendida por su poderosa marina. Entra en conflictos bélicos cuando le conviene e impide la hegemonía de otro país y con tenacidad y astucia se apodera de puntos estratégicos que le aseguran el dominio de los mares.


d




El “caso de los catalanes”

Denominación dada al conjunto de debates y acuerdos sobre el destino político de Cataluña en el contexto de la Paz de Utrecht.


Antecedentes

En Navarra y Aragón
No hay quien tribute un real;
Cataluña, Portugal
Son de la misma opinión;
Solo Castilla y León
Y el noble pueblo andaluz
Llevan a cuestas la cruz
(Francisco de Quevedo)

Dice el refrán: “Donde no hay harina, todo es mohína”.

El reinado de Felipe IV supone el ocaso del Imperio español.- España continúa envuelta en guerras y sin medios económicos para sostenerlas. En el reino de Aragón se niegan a ayudar al Rey. El Conde-Duque de Olivares propone a Su Majestad que instaure una política centralista, que uniforme la administración en relación con impuestos y levas; o, por lo menos, que imponga la “Unión de Armas” (ideada por el mismo Valido) que dice: “Todos los reinos, estados y señoríos de la Monarquía Hispánica contribuirán en hombres y en dinero a su defensa, en proporción a su población y riqueza”.

Guerra “dels segadors” o de Secesión

1635.- Período francés de la Guerra de los 30 años. Francia ataca a España.

Aragón y Valencia ceden y envían parte de la ayuda que Olivares pide; Cataluña continúa negándose. El Conde-Duque se queja de su indiferencia y envía tropas. Los catalanes también se quejan porque los soldados son “extranjeros y herejes” y se dedican al pillaje en un momento en que una plaga ha asolado las tierras.

1640, 7 de junio.- Fiesta del Corpus Christi, que, después de los hechos, pasa a llamarse “Corpus de la Sangre”.

Los segadores llegan a la ciudad y se amotinan. El virrey, Conde de Santa Coloma es asesinado. Revolución social.

Las autoridades catalanas piden ayuda a Luis XIII y le ofrecen ser Conde de Barcelona. Les invade el ejército francés cuyo comportamiento es peor que el del español. Cataluña soporta al invasor y lo mantiene económicamente, al tiempo que constata que Francia es más centralista que España. Los odios continúan.

1652.- Rendición del ejército franco-catalán. Felipe IV es reconocido nuevamente como soberano: no toma represalias, restablece los Fueros y nombra virrey a su hijo natural Don Juan José de Austria.

Se han perdido el Rosellón y parte de Cerdeña que pasan al dominio francés.

cd




Cataluña, que ha destinado embajadores en Londres, Viena y La Haya, lucha:
-1.º en el campo de batalla.
-2.º en el campo diplomático.

(Ver Ideario corona de Aragón y Pactos Vigatans y Génova y Tratado de Utrecht)

1712, enero.- Antes de firmarse el Tratado de Utrecht, la reina Ana dice a los españoles que: “por motivos de honor y de conciencia se sentía obligada a reclamar todos los derechos de que gozaban los catalanes cuando les incitaron a ponerse bajo el dominio de la Casa de Austria”.

El secretario de Estado, en nombre de Don Felipe, contesta: “ni en caso de extrema necesidad el Rey de España accedería a lo que Inglaterra quiere exigir de él a favor de los catalanes”. La intención de Felipe V era limitarse a conceder la amnistía “porque en lo tocante a los privilegios que los reyes, por pura bondad, otorgaron a los catalanes, se han hecho indignos de ellos por su mala conducta”.

Carlos VI se retira de “Utrecht” porque no se atiende su petición de que la Corona de Aragón quede bajo el dominio de la Casa de Austria, o convertida en República Catalana bajo la protección de los aliados o del Emperador.

1713, 28 de junio.- El embajador Dalmases es recibido por la reina Ana: “He hecho todo lo que he podido por Cataluña”, dice la soberana. (“Pilatillos”, que decía Luis Coloma.)

1713, 13 de julio.- Firma del Acuerdo entre Gran Bretaña y España. A los catalanes les daré “todos aquellos privilegios que poseen los habitantes de las dos Castillas”, dice Felipe V, asegurándoles el comercio americano y optar a cargos de la monarquía.

1714, marzo.- Tratado de Rastatt. El “caso de los catalanes”, la cuestión más difícil de resolver, comenta el príncipe Eugenio (el cual no hace nada por solucionarlo y se pliega a las órdenes de los “mayores”).

1714, 6 de marzo.- El Impero se incorpora a la Paz de Utrecht sin que Don Felipe ceda.

1714, 1 de agosto.- Muere la Reina Ana. Nuevo monarca: Jorge I de Hannover. Sube el partido whig al poder, en desacuerdo con el gobierno anterior.

1714, 29 de septiembre.- El rey Jorge ha llegado a Londres y prometido solucionar el “caso de los catalanes”. Demasiado tarde. El día 12 Barcelona ya había capitulado.

1715.- Capitula Mallorca.

1715.- Jorge I y el partido whig no mantienen sus promesas: aceptan los acuerdos de Utrecht por las ventajas que reporta a su país.

1719.- Guerra de la Cuádruple Alianza. España sola ante Europa. Los franceses invaden norte de Cataluña y, presionados por Inglaterra, anuncian el restablecimiento de los Fueros. Felipe V destituye a Alberoni y aquí no ha pasado nada.

1720.- Fin Guerra Cuádruple Alianza.

La situación ha avivado las esperanzas austracistas. Diecisiete cartas se cruzan entre Viena, Génova y Barcelona. ¡Carlos VI va a ayudarles! Deseos fallidos. Don Felipe había prohibido esta clase de correspondencia.

1721-1724.- Congreso de Cambrai. Carlos VI manda un documento:

“Los reinos y provincias, ciudades, islas y comunidades de una y otra parte (la Monarquía de España y el Imperio) serán restablecidas en el goce y libre posesión de todos sus privilegios, leyes, fueros, constituciones, honores, preeminencias y prerrogativas de que gozaban cuando comenzó la presente guerra (de sucesión española)”.

Los embajadores de Felipe V contestan:

“que tienen orden de que no se acuerde nada más a favor de Cataluña que lo que ya se fijó en el artículo 13 del Tratado de Utrecht. Es decir, que sean tratados como las provincias más favorecidas de España, que son las dos Castillas”.

1725, 30 de abril.- Tratado de Viena.

-El Emperador renuncia a sus derechos a la Corona Española.
-El Emperador reconoce a Felipe V como Rey de España y de las Indias.

                                                                                                                                                 Felipe V y la Real familia. Van Loo

A través de los tiempos hay un “austracismo persistente”. (Ernest Lluch) Traducido en panfletos y publicaciones.

Y un eterno etcétera, etcétera, etcétera…








Clan de los españoles

Cuando partió el Archiduque le siguieron entre veinticinco y treinta mil austracistas. Si en la Corte de Barcelona se notó la presencia de los alemanes, en la de Viena llama la atención la influencia de los españoles.

Un clan (presidido por Folch de Cardona, antiguo Arzobispo de Valencia) que copó puestos importantes durante el gobierno de Carlos VI.

¿Cómo remunerarles? El Emperador destinó las rentas cobradas en las antiguas posesiones españolas en Italia para premiar su fidelidad.

Cuando por avatares de guerras y tratados posteriores estos estados fueron volviendo al dominio de España, los ingresos que revertían al Imperio menguaron y por tanto igualmente las cantidades que percibían los componentes de este clan.

Felipe V, en la posguerra, mantuvo el recelo y la desconfianza hacia los austracistas, incluidos los eclesiásticos. Se admitió la vuelta a España de exiliados, pero estudiando cada caso. Negativa determinante: haber participado en la resistencia de Barcelona.

Felonía

Según el Derecho Público, vigente en la época, los catalanes cometieron felonía (deslealtad o traición) al renegar de los juramentos hechos en las Cortes de 1701, diciendo lo contrario en 1705. ¿Se hicieron los primeros bajo “amenaza de ocupación”? No hay pruebas. En los segundos sí que había tropas austracistas.








Economía de la Casa de Borbón


Dice D. Felipe: “Mi real intención es que todo el continente de España se gobierne con unas mismas leyes”.

Decretos Nueva Planta.- Conjunto de decretos promulgados entre 1707 y 1716 por Felipe V, por los que quedan abolidas las leyes e instituciones de la Corona de Aragón.
-Aragón: 1707
-Valencia: 1707
-Cataluña: 1714 y 1716

Al finalizar la Guerra de Sucesión, Felipe V se encuentra con el Reino sumido en una situación económica ruinosa. Se impone una profunda renovación en la administración. Un siglo de paz interior (1715-1808) conduce a una restauración moderada que beneficia a todos. Saneamiento y fin de la corrupción.

-Centralización del poder: Consejo de Castilla y abolición de Fueros
-Secretarías de Hacienda y Estado (actuales ministerios)
-Funcionariado profesional
-Presión fiscal equitativa, créditos
-Mercado Único
-Proteccionismo: prohibición importación de productos extranjeros, en beneficio de los nacionales
-Creación de Aduanas
-Reales Manufacturas (Real Fábrica de Tapices)
-Protección de la agricultura
-Aportación de las posesionas de Ultramar
-Reorganización del Ejército y la Marina
-Virreinatos, Audiencias, Intendencias
- Fundación de las Reales Academias

                                                                                                                                               
Se proteje especialmente a Cataluña: en su beneficio actúan su laboriosidad junto con el rompimiento de las normas feudales.

A este respecto se puede consultar la teoría del economista Marar Olson (1982). Al acabar la última (¿?) guerra mundial, muchas naciones se vieron favorecidas por el Plan Marshall. En Italia los resultados fueron espectaculares, porque se cambiaron al mismo tiempo las estructuras políticas y económicas; evidentemente muy protegidos por el primer país vencedor.

Hasta se decía que el Vaticano estaba mantenido por Cáritas norteamericana.

Y se oían comentarios: “La próxima guerra, en el bando de los vencidos”.

                                                                                                                              Mausoleo de Felipe V. Colegiata Granja San Ildefonso


1738.- Se celebra el matrimonio entre Carlos III de Borbón (1716-1788), hijo de Felipe V y M.ª Amalia de Sajonia (1724-1760), sobrina-nieta del emperador Carlos VI. Reina que introdujo en España la costumbre navideña del “belén casero”, importada de Nápoles. Dicen las crónicas que la real pareja fue muy feliz.










https://www.youtube.com/watch?v=iHj6NR6H0tc

https://www.youtube.com/watch?v=ErjaXuTDaS4

https://www.youtube.com/watch?v=QDRwPj7A_bs&index=2&list=PLfTtsoT8VS-zBQssEiUT2ckHcON88j6d0

https://www.youtube.com/watch?v=0piryGOLOuM

https://www.youtube.com/watch?v=-m46vv8_wBQ

https://www.youtube.com/watch?v=qKoX01170l0

https://www.youtube.com/watch?v=jX6L8I4KmQA

https://www.youtube.com/watch?v=nt6HtoBUQTk

https://www.youtube.com/watch?v=7cvy01ERqrU

https://www.youtube.com/watch?v=QQbW75y3P9g

https://www.youtube.com/watch?v=5S_QSrelsw4